Susana, muy dura con Tinelli: "La gente ya odia el baile"

La diva habló en una extensa entrevista con la revista CARAS y no dejó tema sin tocar

La nota central de esta semana en la revista CARAS es una larguísima entrevista con la diva número 1: Susana Giménez. Los tópicos: su opinión sobre la televisión argentina, la relación con su nieta Lucía Celasco, las conquistas que pasaron por su vida (cuáles fueron ratas y cuáles generosos), su rutina (¡se levanta a las 11.30 am!) y qué proyectos tiene para lo que queda del año (¿vuelve a la tele?). Sobre la televisión, la competencia y Tinelli: "Estamos transitando una cierta decadencia. No extraño para nada. No haría el Bailando, ¿qué voy a ir a hacer, el ridículo? La gente ya odia el baile, no aguanta más. Cuando veo que viene la parte del baile, cambio". "A mí no me destrona nadie, mucho menos un hombre. Yo tengo más límites que Marcelo. Lo que siempre he admirado de él, es que cuando se está cayendo un poco, hace cualquier cosa y sube. Cualquer cosa. Yo tengo mis límites y jamás podría ofender a nadie. Nunca haría llorar a la chica del ACV (por Verónica Perdomo). "Sebastián Ortega me ofreció hacer un reality. Una cámara estaría conmigo las 24 horas. Pero no me animé. Pensé en mi familia, somos muy poquitos y encima, a ninguno le interesa ser parte del showbusiness. Ya ningún proyecto me tienta económicamente". Sobre la relación con su nieta de 18 años, Lucía: "Es el sol de mi vida. Tiene graves defectos: un carácter muy fuerte, pero es un amor. Yo me llevo brutal, estoy todo el día chupeteándola y no la quiero retar en nada. Nunca le faltó nada, tiene auto y todo lo que se pueda tener material. De esa manera no se le da valor a la guita. Y esto pasa porque no se tuvieron que romper el culo para ganarla. La obligación que tienen los padres es enseñarle que todo cuesta en la vida y que nada es para siempre. Que podés perder todo en cualquier momento". Sobre sus amores y la plata: "Siempre me enamoré de pobres. Y ellos para seguirme a mí, se convierten en cafficios. Yo nunca fui interesada. Ahora si mirás a tu alrededor, todas las chicas están casadas con archimillonarios. ¿Qué pasó?" "Hombres que me sorprendieron con algo...Carlos Monzón, Jorge Rodríguez, Ricardo Darín. Pero no eran riquísimos. Jorge me regaló un Mercedez. Carlos fue un tipo diferente...Cuando vino a vivir a mi casa, me preguntó: 'Che, ¿quién pone la guita en esta casa?' Le dije que yo, y él me respondió 'la comida la tiene que pagar el hombre, nena, qué te pasa...'. Desde ese momento, Carlos llamó a mi mucama y le dijo: 'De ahora en más, la plata para la comida la pongo yo'." Sobre la vuelta a la tele en 2013: "Sinceramente no lo sé. Tendríamos que ver cómo está el país. Mis contratos son anuales. No tengo nada decidido ni firmado".

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