Lola Ponce fue la gran figura del cierre del Vía Crucis viviente en la localidad de Misión Laishí, Formosa. La actriz y cantante fue una de las grandes atracciones de la jornada, con un show exquisito donde interpretó el Ave María de Franz Schubert en latín, el mismo que grabo en Castel Gandolfo, Roma, para el Papa Benedicto XVI hace días nada más.
Lola, junto a Gustavo Bertuol, coreógrafo formoseño que se ha ganado un lugar destacado entre los mejores del país, una gran orquesta, bailarines y un vestuario impactante, desplegó un espectáculo que fue reconocido por el gran número de asistentes que celebró la Semana Santa.
Sin embargo, no todo fue de color de rosas para la presentación de la artista: el obispoMonseñor José Vicente Conejero calificó de “desubicada” la actuación de la santafesina, según recoge el diario El Comercial.
En comunicación con Radio Uno, Conejero expresó que el show de Ponce “no condice” con el espíritu de la festividad, y consideró que es “un acto desubicado”. Para el religioso, Ponce es “una estrella de la televisión que va a realizar el lanzamiento de sus últimas obras”, y cree que “tendrían que haberlo pensado un poquito mejor porque no es el momento oportuno”.
Con respecto a las gigantografías con la actriz vestida de monja que se usaron para promocionar el evento, el obispo dijo que “debe ser para representar algo, yo desconozco pero se habla de una artista y yo no he visto ninguna vestida de religiosa, a no ser que interprete el papel de religiosa”.
El show, sin embargo, se llevó a cabo con total normalidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario